¿Mi cuerpo tiene memoria? ¿Será por ello qué bajo y subo?

Esa fue la inquietud de Andrea, economista de 33 años, 1.68 metros de estatura y 87 kilos de peso, hace cerca de 8 meses.

Andrea a lo largo de su vida ha mantenido una lucha permanente con su físico, desde pequeña sus padres recurrieron a nutricionistas (los dulces, harinas y grasas fueron alimentos vetados en su hogar).

Su disputa con su cuerpo aumentó al llegar a la universidad, el sube y baja era algo que la deprimía; salir en grupo con sus compañeros a ranchos, casa de campo o fincas, era un plan negados por su complejo al vestir un traje de baño. Las fotos las evitaba, eran prueba de su sobrepeso lo cual era evidente en los cachetes, papadas, gordos acá, y allá otra llanta. Todo le generaba reacciones de gran complejidad, por unos días dejaba de comer y en otros acababa con la alacena.

A la edad de los 26 años se sometió a una liposucción, durante un año con un peso de 70 kilos, confiesa fue la luna de miel más hermosa que ha vivido con su cuerpo; tiempo en el cual conoció a su actual esposo; recuerda lo activa y feliz que se sentía.

Pero su cuerpo comenzó a recuperar los kilos perdidos, se realizó tratamientos estéticos, hidrolipoclasia, inicio de dietas, consumo de pastillas - suplementos, colocación de balines, creando en ella la sensación de vértigo ante el baje y suba al que se expuso cada vez que iniciaba una nueva solución a su sobrepeso.

Una de sus inquietudes fue saber si es cierto que el cuerpo tiene memoria. Para contestar esta inquietud es necesario analizar varios aspectos.

1.  Una persona podrá hacerse cualquier intervención quirúrgica, bajar el peso que desee bajo este procedimiento, pero si no incorpora buenos hábitos de alimentación y de vida, su cuerpo volverá a retomar los kilos perdidos.

2. Las dietas relámpago, los constantes ayunos, generan resultados no permanentes, adicionalmente pueden ocasionar desordenes y alteraciones cuyas consecuencias pueden ser peor que el sobrepeso a combatir.

3. El consumo de pastillas quemadoras de grasa y/o aceleradoras del metabolismo, durante su consumo genera inapetencia. El deseo de no comer, ayuda a que la persona consuma menos de lo que generalmente lleva a su estómago.
Pero estas, generan grandes perjuicios en la salud del paciente, presentando dependencia del medicamento. Ante la suspensión de éste, inicia en su vida la ansiedad y unas ganas incontrolables por comer, aumentando nuevamente el peso perdido y posiblemente más del inicial.

4.     La rutina de entrenamiento  intenso y estar varias horas sin comida en el estómago trae una consecuencia indeseada: se desarrolla una resistencia a adelgazar, por lo que no será proporcional el desgaste y fatiga frente al objetivo alcanzado.

Ahora bien, la persona que inicia un proceso para bajar de peso, debería estar acompañado del apoyo de un profesional en psicología. Puesto que el paciente no sólo enfrentará durante la evolución del tratamiento satisfacción y alegría al bajar de peso, sino que también será necesario que se adapte y acepte la nueva imagen que se refleja ante el espejo.
Adicionalmente, será necesario trabajar para hacerle entender al inconsciente que el dolor generado, malestar, sacrificios que se puedan haber presentado durante el tratamiento, no está relacionado con una enfermedad del cuerpo.
En un gran porcentaje de casos, aunque el paciente sea consciente de la importancia de consumir alimentos sanos y en porciones razonables, su inconsciente siente la necesidad de volver al peso inicial – momento en el cual no había dolor, drenaje, malestar.

Andrea es mi paciente desde marzo del 2011, inició el tratamiento de la Banda Gástrica virtual con un peso de 87 kilos; en la actualidad (15/11/11) su peso es de 67 kilos y está a dos semanas de implantarse la segunda banda gástrica virtual. (Su meta es pesar 66 kilos).

Hoy no sólo acepta y ama su cuerpo, es una mujer con mejor temperamento, segura, conocedora del poder interior que hay en ella, sino que, lo más, importante siente que por primera vez sabe lo que quiere de la vida.

Andrea bajó 20 kilos sin dietas, medicamentos, suplementos. Incorporó a su vida buenos hábitos de alimentación y de vida.

BGV Aequilibrium la mejor solución contra el sobrepeso


Imagen by pesoideal

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